sábado, 30 de septiembre de 2023

DISCOS DE 2023: Molina, Talbot, Lofgren & Young - "All Roads Lead Home":




Como si se tratara de una superbanda, los cuatro músicos Ralph Molina (batería), Billy Talbot (bajo), Nils Lofgren (guitarra) y Neil Young, han querido manufacturar un disco que les sacara de los corsés de los Crazy Horse, buscando la igualdad entre ellos y en donde cada una de las cuatro patas tuviera el mismo peso. O lo que es lo mismo, este disco no nació bajo el liderazgo de Neil Young, sino a través de las aportaciones "democráticas" de todos los músicos. De hecho, cada uno, a excepción del canadiense, aporta tres piezas al álbum compuestas en los duros días del confinamiento. Por parte del autor de "Zuma" su aportación reside en la pieza "Song of the Seasons", incluida en su disco "Barn" (2021) que llega interpretada en directo.

                           

Una nueva reunión de estos viejos rockeros que se publica tras la que fue una de sus mejores colaboraciones recientes. Nos referimos al excelso álbum "World Record" que Neil Young y los Crazy Horses publicaban en octubre del año pasado. Si bien todos, en más o menos intensidad, vamos siguiendo la carrera de Neil, hay que hablar del talento de sus compañeros. En este sentido merece pararse a escuchar el soberbio "Love & Inspiration" que Ralph Molina editó en 2019 . Por su parte Billy Talbot no había publicado nada desde hacía casi diez años cuando editó el álbum "On the Road to Spearfish (2013) y un homónimo EP (2014) con su otro proyecto, Wolves. Por lo que se refiere a Nils Lofgren es el "caballo loco" más prolífero de los tres, ya que, al margen de ser también un miembro estable de la E Street Band desde la gira del "Born In The USA", se ha labrado una sólida carrera en solitario que arrancó en 1971 con "Grin" y que el pasado julio tuvo su última entrega con "Mountains" (2023), en donde aparte de Young participó Ringo Starr y el fallecido David Crosby. Todo ello al margen de sus giras, conciertos y proyectos que tuvieron que aparcar en el 2020 por la pandemia.


                                        

En cualquier caso, los cuatro músicos llegaban en plena forma e inspiración al año en curso, en el momento en el que han querido reivindicar sus individualidades con este "All Roads Lead Home" que ya es uno de nuestros elepés favoritos del 2023. En él, Talbot aporta su voz rasposa en el medio-tiempo inicial "Rain", en la dramática balada "The Hunter" y en la ensoñadora "Cherish". Molina también tira de lentas con la ochentera "It’s Magical" y "Just for You", ésta con piano y saxo, aunque en "Look through the Eyes of Your Heart" aparece más guitarrero y salvaje. Por su parte Lofgren trae sonido americana con "You Will Never Know" y su slide. En "Fill My Cup" tira de blues arenoso, mientras que en "Go With Me" los solos de guitarra están al servicio de la épica. La guinda al pastel la pone Neil con su interpretación celestial a la acústica y harmónica que nos retrotrae al "Harvest" (1972) o al "Harvest Moon" (1992).


Unos tipos que tienen mucho que decir aún. Se conocieron hace más de cincuenta años, han perdido compañeros por el camino, han vivido mil y una batallas, y lo han dado todo encima del escenario, a la vez que iban puliendo sus voces y talentos musicales. Por ello este "All Roads Leave Home" les ha salido fácil y del tirón. Ojalá sigan por este sendero.

Por Àlex Guimerà









lunes, 25 de septiembre de 2023

PAUL WELLER en Sala Razz (18/09/23):





Si alguien tuviera que escribir un manual de cómo deberían de envejecer los roqueros sin duda alguna le aconsejaría que pusiera el foco de atención en la carrera de Paul Weller. Con apenas 65 años sigue siendo un tipo muy interesante al que seguir su trayectoria discográfica, con nuevas publicaciones que siempre contienen aspectos novedosos, pues él se resigna a vivir de los réditos del pasado. Ejemplos de ello son sus dos discos de estudio más recientes: "On The Sunset" (2020) y "Fat Pop. Vol 1" (2021), notables compendios de canciones en los que aúna melodías pop con texturas instrumentales muy trabajadas, y que en ocasiones se sirven de la electrónica añadiendo esos matices experimentales a los que el británico no ha dado la espalda. Pero es que además, el "Modfather", ha sabido trabajar unos directos donde se ha rodeado de excelentes músicos, manteniendo la energía de antaño y evitando caer en esas rutinas que otros de sus contemporáneos sucumben a base de autoplagios y "revivals" nostálgicos.


                         

Muestra de ello la tenemos en la actual gira y las unánimes buenas sensaciones que va dejando allá por donde pasa. Fue el caso de Vigo, Bilbao, Madrid y una Barcelona a la que repetía en una abarrotada Sala Razz tras su paso en 2017 para presentar ese alegato soul-funk que fue "A Kind Revolution". Ya en los prolegómenos dimos cuenta de las dos baterías en el escenario, de las numerosas guitarras, dos teclados, instrumentos de viento y todo un equipamiento que nos anticipaba lo que íbamos a disfrutar.

                          

Una sólida banda formada por seis dinámicos músicos (siete si contamos a Weller) que a lo largo de las exactas dos horas de actuación fue alternando instrumentos, desplegando vigor y precisión. Perfecta combinación de la joven sección rítmica (dos percusionistas, bajo) y teclado, con la experiencia y virtuosismo del saxofonista-flautista Jacko Peake y del magnífico escudero que es Steve Cradock a la guitarra (¿Para cuándo nuevo disco y gira de sus Ocean Colour Scene?).

                     

Con un setlist de hasta 28 temas, la banda funcionó a pleno ritmo y a todo trapo encadenando pieza tras pieza sin alargarlas -con contadas excepciones- bajo un sonido rock, energía punk y alma soul. Sobre el actual estado de gracia del cantante del pelo plateado merece que hagamos un punto y aparte, pues estando a la edad de jubilación no sólo mantiene intacta su elegancia y pose, sino que sorprende cómo conserva su brío juvenil cuando ataca la guitarra o el piano y cómo sigue explotando esa garganta digna de los mejores "soulmen" de los sesenta.

                         

Lo hace con un repertorio que alterna los temas de sus dos últimos trabajos con sus éxitos de los noventa, con concesiones puntuales de los Jam o Style Council, obviando las dos primeras décadas del milenio. De las nuevas canciones disfrutamos mucho con la que dio arranque, "Cosmic Fringes", y su marcha power-popera; una "Old Father Tyme" con efluvios del "My Sweet Lord" de George Harrison; una "Fat Pop" que podría haber firmado Damon Albarn; la dulzura de "Village", el intimismo de "Rockets" o los desarrollos instrumentales de la jazz-funk "More" y "On A Sunset", digna de la Motown de los setenta.

                              

De sus clásicos en solitario sonaron, entre otros y en la recta final, "Above The Clouds", recordando al Marvin Gaye más romántico, la maravillosa "Broken Stones" o la sentida "Wild Wood" (¿Nadie piensa en Bill Withers cuando la escucha?). Pero los momentos de locura llegaron, sobre todo, con "Shout To The Top!", de The Style Council, y de la mano de "Start!" (con su ritmo "Taxman") y la final "Town Call Malice", las dos únicas concesiones que hizo a The Jam. Un final tremendo que rubricaba el que seguramente, esta vez sin exagerar, fue uno de los conciertos del año.

                         

Por Àlex Guimerà





martes, 12 de septiembre de 2023

ELVIS COSTELLO & STEVE NIEVE EN EL PALAU DE LA MÚSICA (5/09/23):




                    


Cinco años después de su actuación en el Festival Jardins de Pedralbes, el músico londinense volvía a una Barcelona que ya lo había visto en el Palau de la Música Catalana en 1993, durante la presentación de "The Juliet Letters", y también en el Teatro Tívoli en lo que se considera su mejor visita a la Ciudad Condal hasta la fecha, aunque su bolo en la Sala Razz en 2013 estuvo igualmente francamente bien. Para esta ocasión, la gira contaba con un formato íntimo en el que interpreta interesantes versiones pero sobre todo repasa su extensa trayectoria a través de algunos de sus éxitos, tanto en solitario como junto con los Attractions, Imposters (incluso también los Roots) o incluso con el recientemente fallecido Burt Bacharach.

                              

Tras pasar por Madrid el día antes y tras su interrumpido (por la lluvia) concierto de Granada, Declan Patrick MacManus (así se llama realmente) se presentaba acompañado por el teclista de los Attractions y su socio en mil y una aventuras Steve Nieve, con el que humildemente ha querido compartir cartel en la gira. A lo largo de dos horas, arropados por teclados, guitarras y piano, la dupla fue desgranando en el emblemático escenario del Palau -según Costello ese sí era un auténtico Palacio y no los Hoteles llamados Palace - hasta 21 temas buscando un clima cercano y lleno de elegancia.

                                       


Si bien uno siempre preferirá la versión más eléctrica del bardo rodeado de una banda de rock and roll al estilo de sus primeros discos en plena era New Wave, hay que reconocer que a lo largo de su larga carrera ha sabido reinventarse y explotar como pocos esa cara más crooner y "jazzística", en donde se ha servido con maestría de la dulzura y de tempos sosegados. Aunque para ser honestos el concierto fue bastante irregular con momentos lúcidos pero otros para olvidar. En especial por el tono de su voz, que arrancó justa -con algún puntual desafine- y que fue despertando a medida que avanzaba el recital, o cuando piano y canto no iban a la par.


                              

Pero seamos positivos ya que nos encontrábamos ante uno de los grandes del pop, y a decir verdad en otros instantes disfrutamos mucho con los aciertos de los arreglos e interpretaciones de otras canciones que, sí, se dejaron escuchar fabulosamente. Y, claro, en todo momento pudimos gozar con su entrega, carisma e historietas de viejo rockero. Para el comienzo, el músico mantuvo su sombrero ladeado y encendió la caja de ritmos mientras Nieve soplaba melódica en "When I was cruel No. 2". Le siguió una fallida "Talking In The Dark", en donde quedó patente que el cantante estaba demasiado desnudo y quizás necesitaba una banda para tapar sus carencias. Mejor estuvo en la naif "Shot With His Own Gun" del notable "Trust" (1981) con su voz más cálida y teatral. El primer pildorazo serio llegó con "Accidents Will Happen" que aún sonando algo lánguida y con poco punch nos retrotrajo a esos maravillosos años setenta en los que el músico junto a The Attractions fue capaz de encadenar cuatro elepés que son auténticas obras maestras - "My Aim Is True", "This Year' s Model", "Armed Forces" y "Get happy" - plagadas de píldoras pop rebosantes de melodía y luminosidad. Del mismo periodo directa a nuestros oídos también apareció la preciosa "Allison", muy aclamada por el público, y hacia el final una tenebrosa "Watching The Detectives" que navegó entre la psicodelia, los ritmos reggae y el dub.


Otras que aparecieron fueron "Toledo", manufacturada junto al gran Bucharach, de quien recordó su perfeccionismo y que sonó tierna y bucólica tras el piano de cola de Steve. O la sentida "Shipbuilding" (también versionada por el antiguo residente de Barcelona, Robert Wyatt), que compuso durante la guerra de las Malvinas y que abordó desde los ritmos electrónicos y la experimentación. Pero el momento cumbre, quizás, tuvo lugar con la ansiada cover de "She" de Charles Aznavour, que Costello popularizó en la banda nonora de "Nothing Hill" allá a finales de los noventa. También estuvo presente el American Songbook con su versión de la taciturna "Almost Blue" que tan bien recordamos en manos de Chet Baker. Más dinámica sonó otro hit de sus primeros años, "(What's So Funny 'Bout) Peace, Love and Understanding", prestada de los Brinsley Schwarz de su gran colaborador Nick Lowe. Perfectamente instrumentada con guitarra eléctrica y piano, además del vozarrón de Nieve. Un momento que ya de por sí justificó todo el concierto.

                                 


En la recta final los bises aparecieron sin que la dupla abandonara el escenario y en el que abordó la reciente "The Whirlwind" y "I Want You", del lejano "Blood & Chocolate" (1986), recuperando ambos músicos sus sombreros sobre sus cabezas y bajo su mejor versión de la noche.

Por Àlex Guimerà




                                      

lunes, 11 de septiembre de 2023

DISCOS ESSENCIALS PER ENTENDRE EL ROCK CATALÀ (IV)- especial "patxanga":

 

Ja assentats al nou mil·leni, i vora l' any 2018, va confirmar-se la proliferació de bandes de gran format (guitarres, bateries, secció de vents...) cantant en català però també en castellà i d' altres llengües. Música mestissa i celebrativa però en ocasions també reivindicativa, va acabar omplint els recintes i places amb públic de totes les edats. Amb la rumba catalana com a punt de partida, els sons llatins, l' ska i el pop-rock van ser el punt en comú d' unes bandes. Anem a veure alguns dels discos que els van llançar cap amunt.


1.- TXARANGO- Cor de la Terra (2017): 

Van debutar amb "Benvinguts al llarg viatge" (2012) amb una peça magnífica com "Quan tot s' enlaira" i d' altres joies, després van confirmar-se amb "Som riu" (2014) amb "Músic del carrer" i "Compta amb mi", però no va ser fins al 2017 on van reafirmar-se del tot i gràcies en gran part a "Lluna a l' aigua" que s' ha convertit en un himne generacional. Però al disc hi ha més himnes com "Som Foc" (amb Cat Empire als versos) o  el mig-temps "Mil ocells" cantat a mitges amb l' enyorat Pau Donés, o la preciosa "Que tot et vagi bé".  Inclús trobem a un dels seus referents, en Manu Chao, a "Terra Endins". Un disc on la banda va profunditzar més i millor en la seva varietat de sons i a sobre va saber acompanyar-se com mai.




2.- BUHOS- La gran vida (2018):

Els de Calafell van debutar el 2010 però no va ser fins aquest quart disc, i després d' haver reformat les seves files, que no van ser reconeguts. Amb una proposta que barrejava estils (rumba, ska, pop ...) i llengües (català i castellà), el disc va petar-ho sobre tot amb "Volcans", un tema que ja forma part de l' imaginari col·lectiu català. Però a l' àlbum hi trobem molts altres himnes juvenils com "L' estiu és llibertat" o "Transmets energia". De la part castellana destaquen "la trama" i la divertida "Nos vamos pa' l festi". També hi ha espai per la reivindicació política "La darrera Colònia" on les connexions sonores amb el rock basc són evidents. Carisma i diversió. 



3.- CATARRES- Tots els meus principis (2018):


 
Els d' Aiguafreda van fer-se populars amb la graciosa "Jenniffer" el 2011 inclosa en el seu àlbum de debut. Després van treure "Postals" (2013) amb grans cançons com "Invencibles", però no va ser fins a "Big Bang" (2015) on van fer un gran pas endavant que van confirmar en aquest "Tots els meus principis" (2018) carregat amb pistes com "Fins que arribi l' alba", "Martina" o "Una cançó que parla de tu", amb un gir cap a melodies més pop que confirmarien en el següent treball "Diamants" (2022). Rumba pop.



4.- OQUES GRASSES- Fans del sol (2019):

Amb el seu quart disc els  osonencs van fer un esforç en modernitzar el seu so mestí. Així van introduir elements de electrònica per a la seva patxanga, de la música urbana, però sense perdre el seu esperit rumbero i festiu. Fruit d' això "In The Night" que va arrassar com a peça de ball i els va ajudar a omplir plaça a les festes majors i festivals. Destaquen també la èpica "Serem Ocells", la divertida "Sta guai" o la salsa rapejada "Més likes" amb la participació d' uns emergents Lindami i Stay Homas.


5.- DOCTOR PRATS- Venim de lluny (2018):

Sorgits de Terrassa, els Doctor Prats es van anar forjant en concerts arreu del territori català i inclús estranger (França, Hongria, Japó...), mentre saltaven a la discográfica Música Global amb el seu segón disc "Aham Sigah" (2016) abans de treure aquest disc de 2018 que els va servir per reafirmar-se a través de la barreja de sons (rap, ska, música electrònica, funk,..). Aquí anava l' ska "Tu Fas" que va tindre moltes escoltes, però també la patxanguera "Caminem lluny" amb els habituals "oooh ooohs", "Ho tenim tot" o l' experimental "Les teves pigues".