sábado, 25 de febrero de 2012

RECORDANDO A RITCHIE VALENS


Murió sin haberse graduado en el instituto, y con la tierna edad de 17 años. Su meteórica carrera apenas duró 8 meses y aún así tuvo tiempo de codearse con grandes como Buddie Holly, Chuck Berry, Dion o Eddie Cochran - este último moriría poco tiempo después en idénticas circunstancias no sin antes dedicarle unas estrofas en “Three Stars- . También para dejar un legado repleto de monumentales canciones como la romántica“Donna”, la desgarradora “Come On Let´s Go”, y su santo y seña, la adaptación de la tradicional “La Bamba”. En ella supo aunar con maestría sus orígenes latinos con la fuerza y el ritmo del rock ´n roll dejando para la posterioridad un nuevo sub-género, el “latin rock”.



Siendo así parece normal que su leyenda haya alcanzado tales dimensiones. Aunque quizás ha ayudado el hecho de que muriera en el famoso accidente de avioneta del 3 de febrero de 1959 en Iowa junto con el mencionado genio de las gafas y autor de “Peggie Sue” y junto con otra incipiente estrella de rock Big Bopper, tras haberse ganado su pasaje en último momento en un cara y cruz.



Nacido como Ricardo Esteban Valenzuela Reyes el 13 de mayo de 1941 en Pacoima (California) en el seno de una humilde familia de raíces mejicanas y criado en San Fernando Valley, ya de pequeño absorbió todas las canciones que su padre le iba poniendo ya fueran blues, flamenco o populares mejicanas. Rápidamente aprendió a tocar la guitarra española primero y luego una eléctrica que él mismo se construyó e incluso se atrevió con la trompeta.




En el High School siempre se le veía acompañado de su inseparable guitarra y con 16 años entró en una banda local llamada “The Silhouettes”. Ya pronto se crearía una merecida fama entre sus conciudadanos, lo que llamó la atención de Bob Kane propietario de la pequeña discográfica Del-Fi Records -y descubridor de Sam Cooke - quien le propuso grabar para él. Así fue como entró en el estudio de grabación para inmortalizar "Come On, Let's Go" (compuesta por él) y "Framed" (de Leiber and Stoller), que formaron su primer single el cual alcanzó el puesto 42 en las listas nacionales. Los éxitos vinieron rápidamente, actuando en televisión (dos veces en ‘American Bandstand’), codeándose con los grandes del momento y girando a lo largo del país. Como la gira que acabó con su carrera “The Winter Dance Party” que debía recorrer en tres semanas 24 ciudades.


A título póstumo su discográfica sacó en 1959 su primer larga duración titulado “Ritchie Valens” que reunía sus mayores hitos y que alcanzó el número 23 de la lista Bilboard. Posteriormente se publicaron otros dos LPs que junto con el anterior recogían toda su herencia musical: "In Concert At Pacoma Jr. High" (1960) y "Ritchie" (1963) ´.


Ritchie Valens (1959) . Temas favoritos: La Bamba, Donna, C´Mon Let´s Go, Framed, We Belong Together.





Ritchie (1963) . Temas Favoritos: Cry,Cry, Cry, Big Baby Blues, Rockin´All Night.




In Concert At Pacoma Jr. High (1960) . Temas Favoritos: La Bamba, Summertime Blues, C´Mon Let´s Go.





Y para finalizar este pequeño homenaje valga la recomendación de la película “La Bamba” de 1987, dirigida por Luis Valdez y protagonizada por Lou Diamond Phillips (Valens), Rosanna DeSoto (Donna) y Esai Morales (hermano de Ritchie), con acertadas adaptaciones musicales de Los Lobos y banda sonora de Carlos Santana. En ella se cuenta su meteórica ascensión pero también sus humildes orígenes y su relación con su medio hermano.


Perfecto largometraje para recordar a un joven genio cuyo destino le encumbró hacia los más alto para inmediatamente hacerle desaparecer en el cielo tal estrella fugaz.

RITCHIE VALENS (13/05/1941 - 3/02/1959)



Por Alejandro Guimerà

domingo, 12 de febrero de 2012

GRANDES DISCOS: Violent Femmes (1983) por VIOLENT FEMMES:


El disco de debut de esta banda de culto de rock americano supo adentrarse en la generación post-punk y capturar muchas de sus esencias adolescentes. Tomando el impulso underground de sus inmediatos antecesores y recuperando el folk de raíces, sus canciones fueron auténticas píldoras del sentir teenager del momento, y a su manera abrieron el camino del rock independiente yankee que marcaría las prolíferas décadas de los ochenta y noventa.

Musicalmente su principal mérito fue aunar la contundencia e inmediatez punk a la acústica y al romanticismo melancólico del folk - Bob Dylan y Hank Williams se encontraban entre sus músicos favoritos -. Aunque la perfecta mezcla que supieron dar entre tan antagónicas formas dejó espacios para el rockabilly y el surf de finales de los 50 y principios de los 60. También para la crudeza psicodélica de la Velvet Underground, referente siempre atribuido a la banda.

La historia de los Violent Femmes - su nombre es un mote del argot local empleado para designar a los necios - arranca cuando dos veinteañeros Brian Ritchie (bajo) y Victor DeLorenzo (percusión) empezaron a tocar en pequeños locales y por las calles de su ciudad natal Milwakee, hasta que conocieron a un enclenque chico de 17 años hijo de un pastor baptista de nombre Gordon Gano (guitarra y voz) al que unieron cuando escucharon sus composiciones. Unas composiciones que había empezado a escribir a los catorce años y que acabarían formando el grueso de este álbum. Por ello en ellas se reflejan tan bien la impulsividad, las inseguridades y lo iluso de los quinceañeros.


El flamante trío siguió actuando de modo improvisado hasta que una noche de verano de 1981 James Honeyman-Scott (fundador y guitarrista de The Pretenders) se encandiló con ellos al verlos tocar delante del Oriental Theatre dónde la ya consagrada formación inglesa iba a dar un concierto. Puesto de acuerdo con Chrissie Hynde invitaron a los tres músicos amateurs para que les telonearan, algo que sería decisivo en su porvenir.

Pero para el arranque definitivo hicieron falta además 10.000 dólares prestados por el padre de DeLorenzo y fichar por unos míseros 50 dólares por un sello independiente llamado Slash Records. El resultado, poco mas de media hora de rock vibrante de nueva generación enmarcado en una portada que mostraba una cándida y descalza niña espiando a través de una vetusta puerta.


El disco galopa al trote de clásicos incansables, como su mayor éxito de siempre“Blister In The Sun”, toda una oda al onanismo sexual no solo por la letra en si sino por el cantar que discurre entre gemidos y susurros que rozan lo grosero. O “Gone Daddy Gone” con sus tintes de clásico imperecedero, seguramente por su inmejorable uso del xilófono o quizás por su perfecta composición en la que intervino el bluesman Willie Dixon. Simplemente fabulosa. También “Kiss Off”, otra de las recurrentes del disco, con su lírica ambigua y oscura, y su estructura country de ritmo descontrolado.

De los aires del campo también vive la lenta “Please Don´ t Go” que incluye un falsete que reza “bye bye” en que Gano roza la autoparodia, algo que contrasta con su deprimente letra.
“Confessions” es un perfecto cruce entre Dylan y la Velvet aunque hay algo de Pattie Smith. Por no hablar de la guitarra surf a lo Dick Dale.


La autora del “Horses” también está presente en la voz inicial acapella de Gano en “Add It Up” justo antes de la desmelenada percusión , la monumental interpretación vocal y unas finales guitarras ¿¿eléctricas?? La temática vuelve ser la sexualidad juvenil.

No queremos ignorar la rítmica “Prove My Love” con sus coros sixties, ni la eléctrificada y descontrolada “Promise” o la balada criminal “To The Kill” de enmarañado bajo juguetón.

Y como perfecto final a tan sublime “opera prima” “Good Feelling”, que suena como una versión barroca de Lou Reed. Desgarradora y deprimente pero a su vez delicada y emotiva.

Para la reedición del disco en Compac Disc se añadieron dos temas más que continúan con la tónica adolescente como son la despiadada “Ugly” y la temeraria “Gimme The Car”.

Coetáneos de una generación etiquetada en España como “El Nuevo Rock Americano” entre los que se encontraban REM, Los Lobos o The Feelies, los de Wisconsin siempre han sido considerados abanderados del inicio del rock alternativo entendido este como movimiento cultural que huye del mercantilismo y sus imposiciones para abarcar unas vías de difusión mucho mas flexibles y permisivas.

Prueba de ello es que estas primeras canciones de los Femmes aun alcanzando una notoriedad nada despreciable no fueron las que coparon las ondas de las radios nacionales de su momento. A pesar de ello supieron calar en muchas de las grandes bandas que irían surgiendo en aquellos años - Camper Van Bethoven, Orange Juicie, Pixies, Pogues (¿la versión celta, bizarre y ruda de los VF?), y un largo sinfín– y han sido a lo largo de los años un claro referente de cómo la ausencia de ataduras e imposiciones externas favorece la creatividad y la inovación artistica.

Por Alejandro Guimerà


Blister In The Sun

When I'm walkin' I strut my stuff, man I'm so strung out
I'm high as a kite I just might stop to check you out
Let me go on like I blister in the sun, Let me go on big hands I know you're the one
Body and beats I stain my sheets I don't even know why
My girlfriend she's at the end she is starting to cry
Let me go on like I blister in the sun, Let me go on big hands I know you're the one...
When I'm walkin' I strut my stuff, man I'm so strung out
I'm high as a kite I just might stop to check you out
When I'm walkin' I strut my stuff, man I'm so strung out
I'm high as a kite I just might stop to check you out
Body and beats I stain my sheets I don't even know why
My girlfriend she's at the end she is starting to cry
When I'm out walkin' I strut my stuff man I'm so strung out
I'm high as a kite I just might stop to check you out
Let me go on like I blister in the sun Let me go on big hands I know you're the one