Una de las citas ineludibles de este otoño por nuestras salas era la visita del gran Nick Lowe junto a Los Straijackets. Con parada en Madrid y Valencia, su participación por el consolidado y crecido Festival de Blues de Cerdanyola (Barcelona) suponía uno de los platos fuertes del evento junto a The Silos quienes el día siguiente iban a presentar su álbum mítico "Cuba".
En un entorno bucólico como es el "Bosc Tancat" rodeado de luces y naturaleza, el concierto se anunciaba a una hora intempestiva para ser un jueves como son las 20:00 h. Con todas las dificultades de lidiar con el tráfico y la salida de la capital, aparcar y adentrarse en los jardines que albergaban el directo, uno llegó con el concierto arrancado y escuchando la formidable "Ragin' Eyes" con la dulce voz de Nick cual canto de sirena.
Aposentado en las primeras filas y contemplando el escenario con el cuarteto de músicos de Nashville tras sus máscaras de lucha libre mejicana y el rockero del pelo blanco abordando la acústica en el centro de atención. Hay que decir que la colaboración que arrancó en 2016 entre banda y cantante viene funcionando ya que al septuagenario (73 años tiene ya) el sonido robusto le ha sentado como un soplo de aire fresco para seguir presentando sus canciones, y demostrar que desde 1994 con "The Impossible" logró reinventarse con momentos, discos y canciones muy inspiradas. Además Los Straitjackets mantienen su espacio para reivindicar su sonido en solitario y sin voz, tal y como son.
Una "Without Love" nos volvía a endulzar los oídos, aunque no tanto como la romántica "Lately I Let Things Slide" demostrando que la voz aterciopelada del cantante sigue a buen rendimiento. También "Shting-Shtang" con la sección rítmica a toda mecha y unos solos de guitarra para enmarcar. La reciente pero no por ello menos memorable "Lay It On Me Baby", mediotiempo excelente a la que siguieron "I Live On a Battlefield" y "Somebody Cares Me".
Y entre medio algunos "Hola" y parlamentos en inglés en los que contó que las canciones son cortas encadenadas buscando la comunión y complicidad con el público, o para destacar las habilidades a la guitarra de Eddie Angel. O cuando antes de su "descanso" contó que iba a cantar una canción más antes de irse al backstage a una "cocktail party", y la canción elegida era su segunda favorita, la poderosa "Tokio Bay".
Así, con el músico de Surret fuera del escenario el cuarteto arrancó su set instrumental con una contundente "Kawanga!". Solos, redobles bateria, bajos alocados, surf rock con efectos de guitarra Dick Dale, pero también western a lo Enio Morricone. Con algún pequeño guiño musical ("Paint It Black" o "Moon River"), una sensacional versión de la banda sonora de "Bonanza". Y para rematarlo todo el clásico "Venus" con las guitarras metralleando y el público coreando "She' s Got It".
Para la vuelta de Nick un cambio de vestido con camisa floreada y una "Love Starvation" que borda junto a su actual banda de acompañamiento, la dinámica "Half a Boy And Half A Man", la balada "Blue On Blue" adornada por el paraje idílico y sus luciérnagas y la sensacional "Trombone" con ese toque Neil Diamond y las cuerdas haciendo las veces de vientos. La cosa iba acabando, lo supimos cuando sonaron empalmados sus dos grandes éxitos "Cruel To Be Kind", pieza pop por excelencia del "Labour of Lust" de 1979 y la versión lenta de "(What' s So Funny But) Peace And Love And Understanding" de su legendaria banda Brinsley Schwarz; ambas sonaron quizás algo decaídas. Con más garbo lució la country "I Knew The Bride (When She Used To Rock' n Roll)" antes del consabido amago de final.
Para la vuelta de Nick un cambio de vestido con camisa floreada y una "Love Starvation" que borda junto a su actual banda de acompañamiento, la dinámica "Half a Boy And Half A Man", la balada "Blue On Blue" adornada por el paraje idílico y sus luciérnagas y la sensacional "Trombone" con ese toque Neil Diamond y las cuerdas haciendo las veces de vientos. La cosa iba acabando, lo supimos cuando sonaron empalmados sus dos grandes éxitos "Cruel To Be Kind", pieza pop por excelencia del "Labour of Lust" de 1979 y la versión lenta de "(What' s So Funny But) Peace And Love And Understanding" de su legendaria banda Brinsley Schwarz; ambas sonaron quizás algo decaídas. Con más garbo lució la country "I Knew The Bride (When She Used To Rock' n Roll)" antes del consabido amago de final.
Para abrir los Bises una versión de la canción de Batman instrumental a todo trapo. La siguió "When I Write the Book" con la que el Sr. Lowe nos invitó a corar su estribillo, lo que hicimos con devoción. Fue el broche final a una velada capitaneada por uno de los monstruos del pop de la nueva ola, quien ha tenido una vejez muy inspirada y quien sigue deleitándonos con esas piezas directas y melódicas como nunca.
Fotos y texto por Àlex Guimerà
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